Día mundial contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA)
¿Qué es la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA)?
Es una enfermedad neurodegenerativa que tiene consecuencias devastadoras para el paciente y su familia, ya que provoca una parálisis muscular progresiva y en sus en sus etapas avanzadas compromete los músculos respiratorios.
Esta afecta el sistema nervioso central caracterizado por la degeneración progresiva de las neuronas motoras, produciendo debilidad de los músculos de las extremidades, abdominales, bulbares y respiratorios.
¿Cuáles son los síntomas?
Los signos o síntomas del ELA varían mucho e ir desde dureza en los músculos (espasticidad) o flacidez y/o dolor, pero suele comenzar con debilidad muscular que se propaga y empeora con el tiempo. Con frecuencia comienza en las manos, pies o las extremidades y luego se extienden a otras partes del cuerpo. Con el tiempo puede llegar a afectar la masticación, deglución, el habla y la respiración.

¿Cómo se realiza el diagnóstico?, ¿Con quién debo acudir?
El diagnostico se realiza a partir de los síntomas del paciente y con ayuda de un estudio llamado electromiografía.
Además de estudios complementarios como la resonancia magnética, análisis de sangre y
orina, punción lumbar entre otros.
Si presentas alguno de los síntomas que mencionamos acude de forma inicial con un neurólogo.

¿Cuál es su tratamiento?
Hasta el momento no existe cura para esta enfermedad, y los medicamentos que se han estudiado no pueden revertir el daño de la ELA, pero pueden retrasar la progresión de los síntomas, evitar complicaciones y hacer sentir más cómodo e independiente al paciente.
El Tratamiento en esta enfermedad es multidisciplinario, es decir que participan varias especialidades médicas y profesionales de la salud, entre ellos neurólogo, medico en rehabilitación, médico en comunicación humana, neumólogo, psiquiatra, psicólogo, nutriólogo, terapeuta físico, ocupacional y del lenguaje.
SI TIENES ALGÚN CONOCIDO CON ESTE DIAGNÓSTICO, TE DEJAMOS UNOS TIPS DE EJERCICIOS PARA REALIZAR EN CASA…
Llevas la rodilla hasta el pecho al mismo tiempo que acercarnos el talón hacia el glúteo, intentando llevar la punta de pie hacia arriba.
Evitar que la rodilla vaya hacia dentro o hacia fuera.

Elevar el brazo entero con el codo estirado por encima de la cabeza.

Manteniendo ambas piernas juntas y con las rodillas dobladas, llevar las piernas a un lado y a otro, los pies y el tronco no deben moverse.

Dra. Margarita Isabel Díaz Sánchez
Médico Especialista en Rehabilitación y Electrodiagnóstico
Puebla, Pue.
Lic. Daniel de La Luz Perales
Lic. En Terapia Física
Puebla, Pue.
Contacto: isadiazrehab@hotmail.com
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